Amenaza gorgojo agave pulquero en Boyé, Cadereyta
Una plaga de gorgojos y picudos amenaza la producción de agaves de la localidad de Boyé, en el municipio de Cadereyta, uno de los principales centros productores de pulque del estado de Querétaro.
Boyé es reconocido por ser un lugar emblemático en el manejo de dicha planta y la preparación de bebidas tradicionales como el pulque y el aguamiel; sin embargo, la presencia de plagas, aunada a la falta de lluvias en la región, han representado desafíos sustanciales para productores locales.
Por ello, productores locales solicitaron el apoyo de la Facultad de Ciencias Naturales (FCN) de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), cuyos especialistas desarrollan un proyecto destinado al control de dichas plagas.
Dicha labor tiene como objetivo principal brindar soluciones sustentables para combatir a los curculiónidos (gorgojos y picudos) que amenazan la producción de agaves, sin recurrir a químicos o pesticidas industriales.
Los especialistas Rosalinda González Santos y Jesús Luna Cozar encabezan el equipo a cargo del proyecto para apoyar a los agricultores de la zona, fomentando prácticas agroecológicas y ofreciendo alternativas sustentables para el control de plagas.
“Inicialmente trabajamos con un proyecto del Fondo para el Desarrollo del Conocimiento (Fondec) cuyo propósito fue caracterizar a las especies de agaves. Al ver la problemática con el gorgojo (que consume a los agaves de todos los tamaños), aprovechamos para comenzar con esta otra iniciativa”, puntualizó González Santos.
El proyecto implementado por la FCN también incluye la realización de talleres especializados con cinco productores cooperantes de diferentes parcelas de la localidad, los cuales abordan el manejo de suelos y su recuperación, ya que se ha identificado un problema de erosión en la zona. De esta manera, se busca promover la adopción de prácticas agrícolas sostenibles que contribuyan a mejorar su calidad de vida y asegurar su sustento económico.
En este sentido, la también investigadora de la FCN indicó que se busca implementar en un futuro actividades formativas en torno a capacitación del agua, así como distinguir la calidad de los pulques producidos de acuerdo con sus propiedades.
“Queremos trabajar en la captación del agua, porque estamos en condiciones semiáridas. De igual manera queremos caracterizar cuál es el mejor pulque de acuerdo con sus propiedades, así como organizar a las y los productores en cooperativas para que mejoren sus ingresos. Es un proyecto fascinante, debido a que es una planta que no solamente se usa para el pulque; también se usa para el forraje de la barbacoa”, mencionó González Santos.
Por su parte, Luna Cozar detalló que esta gestión ha permitido desarrollar un modelo replicable a nivel nacional, toda vez que la presencia de los curculiónidos en las plantaciones agrícolas es una tendencia presente al interior del país.
“Esta es una solución basada en un enfoque agroecológico. La idea es que los productores participen y se apropien del manejo que la Universidad les puede ofrecer, mediante el uso de materiales sencillos que puedan adquirir en casa, para que tengan un pulque orgánico libre de pesticidas. Lo que hemos logrado aquí es un modelo que probablemente podemos replicar tanto a nivel estatal como nacional”, dijo Luna Cozar